domingo, 27 de abril de 2014

Detienen a torturador de Campo de Mayo y le secuestran armas

Mario Rubén Domínguez, alias "Escorpio", fue hallado en córdoba

Se le adjudica la participación en los secuestros de Diego Muñiz Barreto, Juan José Fernández y Floreal Avellaneda, entre otros.

Por: Franco Mizrahi

 El suboficial mayor retirado del Ejército, Mario Rubén Domínguez, fue detenido el viernes por la noche en su casa de Córdoba, acusado por crímenes de lesa humanidad cometidos durante
la última dictadura cívico-miliar, informaron a este diario fuentes judiciales. En el allanamiento, que fue realizado por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, se le secuestraron varias armas por lo que también fue imputado por "tenencia de armas de guerra". A Domínguez se lo sindica como un conocido torturador que se desempeñó en Campo de Mayo bajo el alias de "Escorpio". De acuerdo con los investigadores integró uno de los grupos de tareas que actuó en aquella dependencia castrense en los primeros años del terrorismo de Estado. El próximo lunes será indagado a las 10 de la mañana en los tribunales de San Martín, en Buenos Aires.

Al imputado se le adjudica participación en los secuestros y torturas de Diego Muñiz Barreto (asesinado en marzo de 1977) y Juan José Fernández, de Beatriz Susana Castiglione de Covarrubias, Marilú Obreque Valenzuela e Iris Etelvina Pereyra de Avellaneda (quien fue secuestrada con su hijo Floreal, de 15 años. El cadáver de Floreal fue hallado el 14 de mayo de 1976, en el Río de la Plata). Todas fueron víctimas que pasaron por Campo de Mayo y luego brindaron su testimonio.

Durante muchos años, las pocos sobrevivientes del terrorismo de Estado que estuvieron secuestrados en el centro clandestino de detención (CCD) El Campito, uno de los más grandes del país, asentado en la guarnición militar de Campo de Mayo, mencionaban en sus declaraciones judiciales a un torturador conocido como "Escorpio". "Escorpio siempre fue buscado. Se lo nombraba mucho, sobre todo, las mujeres", explicó un investigador. Tras un trabajo fino que refleja la compleja reconstrucción que se realiza en las causas de lesa humanidad, quienes realizan la pesquisa concluyeron que el mentado Escorpio es Domínguez.
De acuerdo con el análisis de su foja de servicio, los investigadores determinaron que Domínguez prestó servicio "en comisión" en el Departamento de Inteligencia del Estado Mayor del Comando de Institutos Militares desde el 2 de abril de 1976 hasta el 15 de diciembre de 1977. Los testimonios ante la justicia dan cuenta de la presencia de Escorpio/Domínguez en esa fecha en Campo de Mayo y los jefes castrenses que firman sus calificaciones tuvieron actuación en el CCD El Campito. Por caso, en 1976, el coronel Fernando Verplaetsen, entonces jefe del Departamento II de Inteligencia del Comando de Institutos Militares calificó a Domínguez como "uno de los pocos sobresalientes para su grado". En 2010, Verplaetsen fue condenado a 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad cometidos en la ex Zona IV.

En su declaración del 30 de septiembre de 2009 ante el Tribunal Oral Federal de San Martín, el ex suboficial Víctor Ibáñez afirmó que a un torturador (de Campo de Mayo) "le decían Escorpio", "de apellido Domínguez" y señaló que "era ingeniero, suboficial". Ibáñez relató que "una vez sorprendió a Escorpio, que era un sinvergüenza, en un cuartito chico donde había chicas, que le manoseaba los pechos a una chica, cordobesa, que hablaba bien en cordobés". Los investigadores notaron que, de acuerdo con su legajo, Domínguez se formó como ingeniero. El hecho de que haya sido detenido en Córdoba no sería una casualidad.
Lejos de resultar una anécdota, el imputado, en el horóscopo, es del signo Escorpio: nació el 28 de octubre. Ocurre que Marilú Obreque Valenzuela, secuestrada el 30 de marzo de 1976 aseguró a la justicia que "uno de los individuos que les cuidaba se llamaba Escorpio", y que "extrañada ante este nombre le preguntó por qué se llamaba así, respondiéndole este que ese era el signo de 'ellos'".

La detención de Domínguez la ordenó la jueza federal de San Martín Alicia Vence, la misma que está cargo de la causa Contraofensiva Montonera y que fue cuestionada por postergar durante un mes la indagatoria en ese expediente de dos militares retirados que luego se fugaron. Con mayor premura que en aquella ocasión, Vence firmó el jueves pasado un exhorto solicitándole a su par de Córdoba, Alejandro Sánchez Freytes, el allanamiento en el domicilio de Domínguez y su detención. El viernes se ejecutaron las medidas. Desde entonces, el suboficial retirado del Ejército está detenido y a primera hora del lunes será indagado por la jueza de San Martín.

miércoles, 16 de abril de 2014

Un prófugo encontrado: arrestaron al represor Gerardo Jorge Arraez

Tenía orden de captura desde hace dos años. Cuando lo detuvieron, tenía un documento de identidad falso. Fue miembro de las patotas del Banco y el Olimpo, donde era conocido por el apodo de Nito.

 Por Adriana Meyer

A sus sesenta años, Gerardo Jorge Arráez, imputado por crímenes de lesa humanidad, tuvo la energía y los recursos suficientes para permanecer dos años prófugo de la Justicia. Sin embargo, el lunes mientras caminaba cerca de su casa fue detenido por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que le secuestró un DNI con una identidad falsa. Ayer este ex oficial de la Policía Federal y represor del centro clandestino Olimpo fue indagado por el juez federal Daniel Rafecas, quien investiga los delitos cometidos por represores del Primer Cuerpo de Ejército. Arráez, alias Nito, está acusado como coautor de secuestros y torturas de 285 víctimas que permanecieron cautivas en los centros Banco y Olimpo, y su participación necesaria en el homicidio de 19 personas que el 6 de agosto de 1978 fueron “trasladadas” desde el Olimpo, para su seguro e inmediato homicidio. Durante la indagatoria fue asistido por su defensor, el ex juez Francisco Trovato, condenado en 1999 por cohecho agravado, en el sonado escándalo del placard, e inhabilitado de por vida para ejercer cargos públicos, pero no así la profesión de abogado.

Arráez, de 64 años, fue hallado por personal de la PSA, tras haberse fugado en 2012. El Ministerio de Justicia había ofrecido una recompensa de 100 mil pesos para quien colaborara con datos para su detención. Fuentes del caso aseguraron a Página/12 que no ofreció ningún tipo de resistencia. Al momento de ser aprehendido, el represor tenía en su poder un documento de identidad falso, con una foto suya, pero a nombre de Jorge Alberto Rodríguez, clase 1953. Por este hecho, el juez Rafecas ordenó que se investigue el delito de falsificación de documento público destinado a acreditar la identidad de las personas.

Hasta su detención, Arráez ejercía la profesión de abogado, pero a fines de los años ’70 ostentaba el cargo de oficial inspector de la Policía Federal, con destino en el Departamento Situación Subversiva de Coordinación Federal. En los campos de exterminio Banco y Olimpo habría utilizado el apodo Nito, según una de las testigos sobrevivientes que declaró en la causa. Arráez sacaba fotos a las detenidas luego de la tortura y esas imágenes reflejaban los episodios aberrantes que sufrían las víctimas. Los testimonios también relatan que exhibía un exagerado apego al culto católico, a tal punto que las víctimas recordaron que el tal Nito fue quien se encargó de montar una suerte de capilla en el interior del centro clandestino, donde colocó la imagen de una Virgen y cerca de ella un cartel que decía “Olimpo, el lugar de los dioses”.

Una vez que culminó la declaración indagatoria, el represor fue derivado a la cárcel de Marcos Paz y en diez días el juez Rafecas deberá resolver su situación procesal.

Los delitos cometidos en el denominado circuito represivo ABO, que incluye los centros clandestinos Atlético, Banco y Olimpo, ya cuentan con 25 represores condenados y otros diez cuyos casos están a punto de ser elevados a juicio oral. En cambio, la causa de Arráez recién comienza, a pesar de haber estado imputado desde el inicio, porque pudo mantenerse en la clandestinidad hasta ahora.